Calamares rellenos de trigo Bulgur

Este plato formaba parte de los "deberes" de el foro MR de la semana pasada. Nunca había probado el trigo bulgur y la verdad es que tiene un sabor bastante particular. Habrá que seguir experimentando con él. La receta es de sharini.


Ingredientes:

-8 calamares
-Unos 100 gr de trigo bulgur
-1 cebolla troceada
-1 pimiento verde troceado
-1 tomate troceado
-2 huevos duros y 2 batidos.
-1 vaso de caldo de pescado
-1 vaso de vino blanco
Aceite, sal.

Preparación:

Limpiamos los calamares, picamos las patitas y los reservamos.

Aparte cocemos el trigo bulgur en agua con sal, doble de agua que de trigo, hasta que quede seco.

Mientras, vamos haciendo un sofrito con 1 cucharada de aceite, la mitad de la cebolla y del pimiento. Añadimos las patitas troceadas, y cuando esten hechas, los huevos duros picados, y el trigo cuando esté cocido. Se revuelve todo bien, y dejamos enfriar. Rectificar de sal si es necesario.

Cuando esté frío, añadimos los huevos batidos y se mezcla todo bien. Con esta masa rellenamos los calamares y se cierran con palillos.

Los ponemos en una olla a cocer con el vaso de caldo, y con un sofrito hecho con el resto de la cebolla, pimiento y el tomate, y el vino. Cuando estén tiernos los calamares se pueden sacar y batir la salsa si la quereis más fina.


Espero que os guste.

Lubina al vino con crema de Cilantro (Paso a paso)

Por algún motivo que desconozco, mi tendencia a comer ligero es cada vez mayor. Yo, que en mis buenos tiempos me metía entre pecho y espalda mis 3 platos de fabada, seguidos de un arroz con leche, últimamente me decanto más por platos ligeritos. Comidas con menos grasa, bastante pescado y probablemente más verde en mi dieta en el último año que en los 31 anteriores. Hasta tal punto llega el tema, que ahora, si preparo fabes, suelo optar más bien por prepararlas con calamares o con almejas antes que con "gochu" (fabada).

Además, de un tiempo a esta parte (yo creo que en los 3 meses que estuve a dieta acostumbré al estómago a comidas prácticamente sin grasa) prácticamente no puedo comer cosas fritas, especialmente rebozadas. Si me como medio escalope, paso la tarde con la sensación de haberme comido una vaca entera. (Seguro que alguna compi del foro de dietas de MR está orgullosísima de mí)

Y vosotros pensaréis, ¿y por qué cuernos nos cuentas esto? Pues básicamente porque me apetecía, y para explicar por qué me da por preparar últimamente platos como el que os pongo a continuación.




Ingredientes (para 2 personas):

- 2 lubinas de ración en lomos
-2 puerros
-medio manojo de espárragos trigueros
-un puñado de cilantro (4 o 5 ramitas, depende de cuánto os guste)
-media cebolla
-medio bote de leche evaporada
-1 vaso de vino blanco (alvariño, a poder ser)



Preparación (paso a paso):


Cortamos los puerros al bies, quitamos la parte dura a los espárragos y los escaldamos 2 minutos en agua hirviendo. Picamos la cebolla (luego la usaremos para la crema)


En una sartén con una gota de aceite, rehogamos los puerros durante 4 o 5 minutos, sin que lleguen a ablandarse del todo.


Una vez rehogados, distribuimos en el fondo de una fuente refractaria los puerros y los espárragos, salpimentamos y añadimos un poco de agua y un chorrito del vino (siento no ser más preciso, pero es que no sé que cantidades poner, la cosa es que más o menos cubra el fondo de la fuente, no hace falta que los puerros naden en salsa)





Tapamos la fuente con papel de aluminio y la introducimos en el horno a 200º durante unos 12-15 minutos.

Una vez pasado este tiempo, salpimentamos los lomos de las lubinas al gusto, los regamos con el resto del vino y los colocamos en la fuente, con la piel hacia arriba (a mi no me cabían, así que tuve que cambiar de fuente, grrr, más para fregar)

Los metemos al horno otros 12-15minuntos y...

Desgraciadamente, del proceso de la crema de cilantro no tengo ninguna foto, pero es muy sencillo.

En una sartén con un poquito de aceite freímos la cebolla hasta que esté blanda y transparente. En ese momento bajamos el fuego y añadimos el cilantro picado, como 3 cucharadas y lo dejamos cocer unos minutos. Agregamos la leche evaporada y lo dejamos otros 5 o 6 minutos, removiendo para que no se pegue nada. Salpimentamos al gusto y pasamos por la batidora. Y si no os gusta que queden tropezones, pues lo pasáis por un chino o similar.

Ya solo queda emplatar (ver la 1ª foto del post) .

Plato muy ligerito, facilito y delicioso.

Espero que os guste.

Bizcocho amarmolado integral

Sacado, como casi todo, de MR, según receta de Caracola. Este finde quería preparar algo para desayunar durante la semana, y la verdad es que ha salido buenísimo.

Ingredientes:

350 gr de harina integral
150 gr de fructosa (mirar las instrucciones del fabricante, esta medida es para fructosa de herbolario)
100 ml de aceite de girasol
200 ml de leche evaporada
1/2 sobre de levadura
4 huevos
una cucharadita de azúcar avainillado
1 cucharadas de cacao puro en polvo sin azúcar

Se baten los huevos con el azúcar, el azúcar avainillado, la leche evaporada y el aceite.
Cuando está homogéneo se le añade la harina con la levadura y se sigue batiendo
se separa la mitad de la masa y se le añaden dos cucharadas de cacao en polvo
se reparte a cucharadas en el molde, alternando los colores
Horno, 180º, 40 minutos.

Queda menos esponjoso que si se hace con harina normal, pero de sabor está buenísimo.

Espero que os guste.

Pollo macerado en albahaca

Arabia

Anoche, como estábamos de celebración, salimos a cenar por ahí. Como quería llevar a mi novia a algún sitio que no hubiésemos estado nunca, me puse a buscar y recordé que unos amigos me habían hablado muy bien de este sitio, así que decidí ir a ver que tal.
Fuimos sin reserva, pensando que un miércoles no debería ser un día problemático para encontrar mesa en ningún lado y nos dieron mesa, pero detrás de nosotros hubo gente que se quedó sin sitio, así que, si alguna vez queréis ir a cenar a este restaurante, intentad reservar antes.

El sitio está en la calle Piamonte, número 12, en Chueca. Es muy chulo y bastante amplio. Una decoración bastante acertada que recuerda a algo intermedio entre una haifa y una casa de adobe, el único pero que se le puede poner es que, en mi opinión, había algunas zonas (como la mesa en la que nos sentaron a nosotros) en las que la luz era demasiado escasa. Me gustan los rincones a media luz, pero en este caso era demasiado baja. De hecho no saqué fotos del local porque habría necesitado el flash, con lo que habría desvirtuado bastante la decoración.

Pasando al tema del yantar, la carta no es muy amplia, como 10 o 12 entrantes y otros tantos segundos. Pedimos dos entrantes, Falafel relleno de cebolla y cilantro y Zanahorias confitadas con canónigos.


El falafel estaba exquisito, muy tostadito (a mí personalmente es como más me gusta) y acompañado de unos pimientitos asados y una salsa que recordaba vagamente al gazpacho. Y con las zanahorias nos pasó lo mismo a los dos, nada más probar el primer bocado nos vino a la mente el viaje a Turquía que hicimos el pasado verano. Buena señal.

Después pedimos dos segundos (demasiada comida, con un ssolo entrante hubiese bastando), Cuscús de calabaza, pasas y leche y Pastela de pollo y almendras



El cuscus venía acompañado de una salsa que era algo así como la leche en la que se moja el pan para hacer torrijas y la calabaza estaba espectacular, y la pastela..., bueno, es la mejor que he probado, nada empalagosa, aunque llena bastante.

Todo esto estuvo regado con una botella de Viñas del Vero Crianza (somontano, una de mis debilidades) y, como estábamos llenos y los pastelitos típicos árabes llenan una barbaridad, decidimos pasar directamente a un té de hierbabuena del que, desgraciadmente, no hay foto, aunque os puedo decir que estaba muy bueno, quizá un poco demasiado dulce para mi gusto, pero aun así delicioso.

Pues la cuenta al final fueron 43€, así que la relación calidad-precio es de 10. El único pero que le puedo poner al restaurante es que, de los 3 camareros que nos atendieron, dos de ellos eran algo bordes, aunque el otro era encantador. Totalmente recomendable.

Calamares en su tinta

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, y que hoy me caen 32 primaveras (y parece que fue ayer cuando hice mi primera comunión, hay que ver cómo pasa el tiempo), voy a poner un plato que siempre me ha encantado y que he comido con bastante frecuencia, tanto en casa de los progenitores, como después de mi emancipación. Dedicado a mi mami, que fue la que me enseñó a hacerlos, como casi todo lo que se cocinar.

Ingredientes (para 2 que coman bien):
-1 kg de calamares (si, ya se que parece mucho, pero luego se quedan en ná)
-1 cebolla
-3 dientes de ajo
-1 vaso de vino blanco
-2 sobres de tinta de calamar
-1 lata de cerveza (mahou, si puede ser)

Preparación:

En una sartén con un poco de aceite, freímos los 3 dientes de ajo (ya picados) hasta que empiecen a dorarse. Una vez dorados echamos la cebolla picada fina y dejamos también que se dore. Cuando la olla parezca el caldero mágico, de tanto dorado, echamos los calamares que habremos cortado como le gusten a cada uno (en tiras, anillos, estrellitas, etc...) y dejaremos que se hagan hasta que cojan un color rosadito y se hayan reucido notablemente de tamaño.

Cuando haya ocurrido ésto, echamos el vaso de vino, la tinta de calamar disuelta en un poco de agua caliente y rectificamos de sal. Bajamos el fuego y dejamos que reduzca durante media horita. A partir de ahí ya depende de cómo le gusten a cada uno los calamares, es cuestión de ir probando y quitarlos cuando estén lo suficientemente blandos.

Mi acompañamiento preferido para los calamares en su tinta es el arroz blanco, aunque unas patatuelas tampoco le quedan nada mal.

Espero que os guste

P.D. ¡Ah!, la cerveza...es que me gusta tomarme una cervecita mientras cocino :P

Solomillo con setas y ajos tiernos

Receta sacada, para no variar, del foro Mundorecetas.com, idea original (o al menos ella fue quien la subió) de Yilana.



Ingredientes (para 2 personas):

-1 solomillo de cerdo en medallones
-1 bandeja de ajos tiernos
-250grs de setas (las que más le gusten a cada cual)
-aceite de oliva
-vinagre de módena
-sal gorda

Preparación:

En una sartén con un chorrito de aceite de oliva salteamos un par de minutos los ajos tiernos. Cuando veamos que empiezan a dorarse, añadimos las setas ya picadas. Cuando las setas empiezan a soltar agua echamos un chorrito de vinagre de módena, salamos y dejamos que reduzca un poco.

Mientras reducen las setas, iremos asando en una plancha, previamente calentada, por supuesto, los medallones de solomillo hasta que queden al gusto de cada uno.

Una vez listas ambas cosas, sólo queda emplatar con un poquito de sal gorda.

Espero que os guste.

Rollitos de Berenjena, Salmón y Queso Blanco con Crema de pimientos del Piquillo.

Aunque tienen un nombre muy largo, la verdad es que son muy fáciles de preparar, y el resultado es fantástico. Fueron todo un éxito en la última cena que preparé.

Ingredientes:

-berenjenas
-salmón ahumado
-queso de Burgos
-pimientos del piquillo
-nata

Preparación:

Fileteamos longitudinalmente las berenjenas, de forma que queden filetes más bien finitos y los asamos en una plancha o una parrila durante un par de minutos por cada lado. Reservamos.

Cortamos el queso de Burgos en forma de barritas o bastones. Cogemos un filete de berenjena, ponemos encima una loncha de salmón, una barrita de queso, lo enrollamos y lo fijamos con un palillo. Repetimos la operación con todos los filetes de berenjena.

Para la salsa, pasamos por la batidora la nata y unos pimientos del piquillo (la cantidad de pimientos depende, lógicamente, de la cantidad de nata, para un brick pequeño yo puse dos pimientos) y lo ponemos a calentar en un cazo hasta que espese un poco.

Ya sólo queda añadirles la salsa a los rollitos y servirlos, a ser posible, mientras la salsa está caliente.

Espero que os guste

De vuelta

Bueno. Pues tras éstas últimas dos semanas en las que me he prodigado poco por aquí (y por casi todas partes), vuelvo a publicar algunas recetas que espero que os gusten.

El viernes anterior a la Semana Santa me tocó preparar una cena para siete personas, y la verdad es que, si no me mintieron como bellacos, fue todo un éxito. El menú fue ligerito, con tres entrantes y un plato principal, y luego una tarta de chocolate (por aquello de compensar la ligereza de la cena) que hicieron Marcos y Silvia, y que estaba muy buena (y lo dice uno muy poco chocolatero). Los platos fueron los siguientes:

-Volovanes de Espinacas a la Crema de Naranja. No voy a poner la receta. Es hacer las Espinacas a la crema de naranja que estan un poco más abajo y rellenar con ellas unos volovanes.


-Rollitos de Berenjena, Salmón y Queso Blanco con Crema de pimientos del Piquillo.
Casi se tarda más en escribir el nombre que en hacerlos.


-Dátiles con Bacon.
Todo un clásico. Imposible hacer algo más fácil y con mejor resultado.


El plato principal fueron unos Flanes de lenguado y puerros, pero en uno de mis famosos alardes de inteligencia, se me olvidó hacerles una foto, así que hasta que lo vuelva a hacer, os quedáis con las ganas :)